Ausencia


En este tiempo que he estado ausente en el blog me han pasado muchas cosas, unas buenas, otras malas, otras peores; de las cuales he aprendido mucho de cada una de ellas. En este viaje, un señor, muy sabio de hecho me dijo: “Tenemos que aceptar lo que la vida nos da, las personas y las cosas, aceptarlo todo, así sean intermitentes en nuestras vidas, así sean o vengan de la manera que vengan y se vayan de la manera que se vaya; siempre hay que aceptar lo que sea porque al final, simplemente somos pequeñas partículas en este universo tan grande que nos rodea”.  Entre esta y muchas otras cosas de las que hablamos, me enseñó y entendí una vez más que: Todo pasa por algo. Estar con él allí platicando no estaba planificado, pero pasó. Me ayudó mucho a entender muchas cosas, me enseñó otras más y me ayudó a perdonar y perdonar muchas de mis fallas que no me dejaban estar tranquila. También me di cuenta que, él es ese tipo de personas que siempre están en el anonimato en cuanto a su sabiduría, solo le conocen los que le rodean más no lo hace público, pues, si mucha o poca gente sabe de él, esos son los que conocerán un poco de su historia y enseñará lo que aquellas personas estén dispuestas a aprender. Estar con este personaje un lapso de tiempo limitado me ayudó y yo me ayudé al animarme compartir con él, sanamente. Espero que si algún día lee esto, gordo déjeme decirle que: ¡Anímese a escribir un libro!

Así como hubo reconciliaciones con personas y conmigo misma en este viaje, también hubo rupturas, muerte, daño y preocupación. Ciertamente, no todo es como queremos que sea y no todas las personas entienden ciertas cosas de otras por simplemente siempre estar suponiendo cosas y no conocer sus realidades antes de hablar; de estar con una persona tan sabia, regrese a estar con otra que aún está estancada en el pasado, antes lo sabía pero luego que regresé a estar con esa persona una vez más, lo entendí. Y una vez más entendí que, debemos perdonar y perdonarnos para poder estar en paz y seguir adelante; hace tiempo yo decía que a mí personalmente no se me daba eso de perdonar tan fácil y quizás de cierto modo así lo era o es, pero, recordando mí pasado vi que no lo estaba intentando con ganas y sinceramente, creo que el no estar bien conmigo misma y dejarme abrumar por esta persona, contribuyó mucho a yo también estar estancada y vivir en el remordimiento; creo que en algún momento de nuestras vidas hemos tenido una persona así, que nos traiga consigo y nos contagie toda su mala energía. Ahora, analizando mi yo del pasado y mi yo de este presente, me he dado cuenta que en muchos aspectos he evolucionado y no es un secreto que luego de las charlas con este señor del que les hable, no he vuelto a ser la misma y me ha pasado como un videojuego donde sin darte cuenta del nivel uno has avanzado al nivel 10.

Creo que por fin empecé a hacerle caso a esos consejos que he dado a muchas amistades; y aquí estoy, hablándoles un poco lo que fue de mi ausencia en el blog. A veces, cuando creemos que ciertas personas nos dan mala vibra a nuestra vida, en realidad somos nosotros mismos los que queremos recibir y atraemos esa mala vibra, me pasó y también fue una de las cosas que más entendí en este viaje: Me daba mala vida por una persona que creí que por sus errores del pasado me afectaban directamente, que me hacían ser como era; cuando en realidad era todo lo contrario, sus errores fueron sus errores y su pasado y él ya se perdonó ¿por qué no lo iba a perdonar yo si eso me hace bien? Además el ya perdonarse a sí mismo le hace llevar una vida plena y feliz, mientras que yo por su lado estaba estancada en cosas que pasaron hace muchos años atrás que ni al caso debía mantener el recuerdo vivo en mi presente. Otra de las cosas que este señor me dijo: Decide ser feliz. En muchos de mis escritos anteriores manifestaba que poco era creyente de la felicidad duradera sino más bien, de la alegría momentánea; pero, esta creencia aunque la saque de muchos artículos de psicólogos y científicos está un poco errada, pues, el compartir con este señor me pude dar cuenta que, si podemos ser felices a largo plazo, mientras que estemos en paz con nosotros mismos. Claro que existirán tropiezos con cosas del trabajo, familiares y sociales pero son cosas que deben pasar porque sí, y al final del día volverás a ese sitio donde te da paz y las personas te dan paz, donde agradeces el día a día de la forma que venga, donde seguirás entendiendo que si pasó algo tal día es porque debería pasar y a fin de cuentas es una enseñanza, una enseñanza que a mal o bien debemos aceptar, entonces ¿por qué nos cuesta tanto decidir ser felices?.

Agradezco enormemente a Dios, a la vida y al universo por permitirme ser yo quien viviera todos estos aprendizajes, entendimientos y enseñanzas en este viaje y sobretodo en esta etapa de mi vida, donde más lo necesito para entender poco a poco cuales son mis raíces y de dónde vengo. Ya perdoné la razón principal de mis males, ahora solo me queda terminar de perdonarme y seguir avanzando; ¿Cuándo empiezas tú? Quizás tengamos situaciones distintas ¡claro que sí! Pero nada es excusa para no decidir dejar entrar el perdón a tu vida y menos la felicidad, porque sé que si algo anhelamos todos es poder estar en paz con nosotros mismos de una vez por todas, pero eso no pasará hasta que decidamos estarlo.  Una vez más, vivamos cada día como si fuera el último, decidamos ser felices, aprendamos a perdonar pero más que eso aprendamos a perdonarnos nosotros, a valorarnos, a querernos y a saber que somos mucho más de lo que nos dicen que somos y de lo que creemos, porque tenemos mucho más que darle al mundo. Es horrible como tantos jóvenes hoy en día están tristes o peor aún tienen depresión cuando sus vidas pueden ser muy distintas y aunque no es fácil salir de ese vacío oscuro he irlo llenando, solo si nos lo proponemos de poquito en poquito se puede, solo es cuestión de tener ganas de salir adelante. Aceptemos lo mucho o lo poco que la vida nos da, entendamos que quizás es lo que merecemos en este presente por alguna razón que debemos aprender para poder avanzar. Ya lo mencione en el principio de este escrito: “Somos pequeñas partículas en este universo tan grande que nos rodea” ¿Por qué entonces darnos mala vida y atraer malas vibras? ¿Nos animamos a estar en paz? ¿Qué dicen? Porque jamás podemos lograrlo si no nos lo proponemos, ausentemos un tiempo y verán como todo puede cambiar




-G...

Comentarios