Una despedida más...

No sé cuántas veces te he dicho adiós, no sé cuántas veces he escrito una despida; incluso antes de que todo terminara ya las escribía en esos momentos de desesperación y angustia. No sé si esta vez sea la definitiva, no sé ahora si te pueda hacer a un lado en su totalidad. Pero, quiero que sepas que: Escribí esto expresando todo lo que no pude decir antes, cosas que me he estado callando por cierto tiempo y creo es hora de que salga. Quiero que también sepas qué: Te amé con locura, te amé como aún no había llegado amar por eso cuándo a veces decimos: "tú eres diferente" es porque cuando nos llega esa persona que nos enseña y nos hace dar cuenta que podemos amar de una manera distinta a la que de una u otra forma estábamos acostumbrados, sabes y aprendes que puedes amar de distintas maneras y en distintas cantidades, tú eras esa persona para mí y doy gracias porque así fue.

En la oscuridad de mi cuarto hoy te recuerdo, con la lluvia de fondo hoy te extraño, hoy te vi en imágenes, te vi en anécdotas, te vi en mensajes y en llamadas; hoy, aunque no sienta la misma necesidad de antes siento que te necesito, no como cuando estábamos juntos, te necesito como cuando nos conocimos, amigos desconocidos. Una plática sana, unas risas descontroladas, un apoyo en silencio, pero presente; un oído que me pueda escuchar, unos brazos que me puedan abrazar y un hombro donde me pueda recostar mientras desahogo mis penas, eso es lo que necesito, fue lo que siempre necesité; no pido ni pedí más y aunque no te diste cuenta a tiempo, ya no te aborrezco, ya no te guardo rencor, ya pasó. Y puede parecer un poco hipócrita de mi parte escribir estas palabras cuando en el pasado dije más palabras que fueron muy duras, muy egoístas y muy extremistas en algunas cosas,  precisamente hoy que ya a pasado un año de que todo terminó.

Los primeros meses sufriste mucho, lo sé y no te lo hice más fácil, creo que ese es uno de mis grandes defectos, no intentar hacer un poco más llevadero el sufrimiento que genero en otras personas y lo siento por eso. Veo que desde hace meses ya estás recuperándote ¡sabía que eras fuerte! Mucho más que yo, siempre lo supe; ahora, es mi turno para sufrir, supongo que como he dicho antes: "Cada persona tiene su momento y asimila las cosas de manera distinta". Y ahora, más que nunca me doy cuenta de esa creencia, porque la estoy viviendo, ha llegado mi momento. Estas palabras no son para decirte el mal rato que estoy pasando, tranquilo, no eres tú mi principal motivo, pero si uno de los últimos de la lista. Te quiero, a veces te extraño y otras veces también te amo; algo que fue tan intenso y quedó en la nada es muy difícil de olvidar, a decir verdad nunca lo podremos borrar de nuestras memorias porque nunca se pudo dar todo aquello que anhelamos. Pero, el amor hay que alimentarlo cada día, las risas hay que generarlas siempre y la confianza ganarla a cada instante. 

Aunque nos faltaron muchas cosas por hacer y por vivir no me arrepiento de haberte conocido, no me arrepiento de haberte entregado un par de años de mi vida, no me arrepiento de que aparecieras en ella. Al contrario, agradezco que lo hayas hecho, agradezco que me hayas amado, querido, soñado y añorado; agradezco infinitamente tu atención y tu paciencia a veces era poca pero muchas veces era extraordinaria. Contigo aprendí y descubrí muchas cosas, aunque no lo creas; me alegra demasiado que por fin ya estés dándote prioridad a ti como persona y siendo muy ajena a como es tu vida ahora, me alegra muchísimo toda esa nueva vibra que se te siente cada que veo noticias tuyas. Una vez más, te pido disculpas por todos los malos ratos que te hice pasar, todas aquellas palabras hirientes que dije en un momento de ira, todas las promesas incumplidas y en más de una ocasión te pido disculpas por toda la inmadurez. Creo que nos pasó como esa canción que dice: "Eres la persona correcta en el momento equivocado" Lo consideré así y lo sigo considerando, porque nos faltó tiempo juntos, pero, nuestra estabilidad emocional y mental no nos los permitió, así que fue bueno terminar, que mal o bien lo pudimos aceptar y nos pudimos resignar. 

Escribir esto es todo ese desahogo que siempre me pediste y nunca fui capaz de darte, porque cuando ya estaba cerca el final fue cuando más me frené y empeore todo. Así que te pido perdón también por ser ese desastre que nunca termine de ser, que lo creía así pero no fue, era y soy un  desastre que fue empeorando con el pasar de los días y fuiste absorbiendo todo esa locura sin darnos cuenta hasta que luego fue demasiado tarde, ya el daño estaba hecho. Te mereces a alguien mejor que yo, que te pueda brindar la paz y estabilidad que tanto deseas, te pueda abrazar justo en el momento que lo necesites, te pueda regalar momentos y vivencias  como yo siempre quise hacerlo; te mereces muchísimo más que la tormenta que yo soy, mucho más que todo este caos, te mereces muchísimo más que todo lo que anhelas. Por eso, me despido una vez más....



Te quiero. 
Con amor y mucha flojera
-G


Comentarios